Las agencias inmobiliarias estiman que en lo que resta de 2020, los precios se seguirán ajustando tanto en el mercado de compraventa como de alquiler, según la Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria (ESI) elaborada por idealista. La captación de casas para sacar a la venta y el cierre de transacciones tendrán una recuperación más acelerada que los arrendamientos de viviendas, según los encuestados.

 

La cautela sigue siendo la tónica generalizada de las agencias inmobiliarias para el final de 2020, un año marcado por la peor crisis económica en tiempos de paz provocada por la pandemia del coronavirus. El sector inmobiliario no se ha visto ajeno a la paralización de la economía española, y se mantienen la crisis sanitaria con confinamientos preventivos en varias partes de España, como Madrid y las grandes ciudades de su periferia.

 

Las restricciones de movilidad afectan tanto a la actividad de las agencias inmobiliarias como a los potenciales compradores o inquilinos de una vivienda, por lo que hay que estar atentos a cómo evolucionan las medidas de prevención.

 

Mientras tanto, las previsiones de la mayoría de las inmobiliarias que han participado en la encuesta estiman que los precios se mantendrán más o menos estables en ambos mercados hasta finales de 2020 (por encima del 60% de encuestados en ambos casos). Pero no hay que dejar de anotar que un 36% de los encuestados cree que los precios seguirán bajando en el próximo trimestre. Lo mismo ocurre, con el mercado del alquiler, donde un 31% de las agencias contactadas prevé que las rentas del alquiler se seguirán ajustando de aquí a diciembre.

 

Pero mientras los precios continúan ajustándose, el movimiento del mercado sigue adelante y las agencias inmobiliarias afirman que el mercado de compraventa se moverá con mayor rapidez que el de alquiler. De hecho, las agencias prevén una mayor captación de viviendas a la venta (57%) que para el arrendamiento (44%). Y por primera vez en lo que va de 2020, las previsiones de más ventas (43%) son mayores que las de alquiler (40%), mientas que tres de cada 10 agencias encuestas cree que el mercado se mantendrá igual que en el trimestre anterior.

 

Todas estas variables han hecho que el índice de ventas de la Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria (ESI) se recupere por primera vez desde las previsiones para el segundo trimestre de 2019. El índice de ventas mejora casi dos puntos frente al trimestre anterior, aunque sigue por debajo del ‘aprobado’ (44,9 puntos).

 

Son cinco trimestres consecutivos de caídas en la confianza del mercado de las inmobiliarias, cuando en la primavera de 2019 alcanzaba los 67,8 puntos. Desde entonces perdió casi 25 puntos hasta la recuperación que se prevé en los próximos meses. El mayor nivel de índice de ventas del ESI se alcanzó en las previsiones para el segundo trimestre de 2018, con 76,1 puntos.

 

Mientras, el índice de alquiler registra por primera vez unos datos por debajo de los 50 puntos. Para el cierre de año cae a los 46,8 puntos, siete menos que hace tres meses. De hecho, es la mayor caída del índice de arrendamiento desde que se inició la Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria (ESI) en 2018.

 

La evolución del índice de alquiler se ha caracterizado por la estabilidad, frente a los mayores picos en la compraventa. Como en las ventas, los datos de arrendamientos tuvieron un punto de inflexión en el segundo trimestre de 2019 cuando la confianza de las inmobiliarias empezó a decaer desde los 64,1 puntos de ese momento hasta los 46,8 puntos actuales, más de 17 puntos de diferencia. El mayor nivel de índice de alquiler del ESI también se registró en las previsiones para el segundo trimestre de 2018, con 69,2 puntos, rozando el notable.

 

La Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria (ESI)

 

Idealista elabora esta encuesta desde el cuarto trimestre de 2017 con la participación de más de 250 expertos inmobiliarios procedentes de casi toda España. El estudio muestra el grado de satisfacción y previsiones del sector inmobiliario tanto en el mercado de compraventa de viviendas como de alquiler en base a un índice 100, donde la centena sería el máximo dato en positivo y de mayor euforia y el 0 cuando todas las respuestas son negativas y el descontento es generalizado.