Los datos adelantados por los principales bancos en las últimas dos semanas se confirman. En marzo, como consecuencia del parón derivado del coronavirus y el Estado de Alarma, la contratación de hipotecas por el conjunto del sector financiero se desplomó, al igual que la del crédito al consumo, mientras que la de empresas se disparó. Según los datos del Banco de España, el importe de financiación para la adquisición de viviendas se hundió en tasa interanual un 25,2%; para otros bienes cayó aún más, un 38%; y para proyectos empresariales avanzó un 39%.

 

Las cifras recogen el frenazo económico de los 15 días de inactividad de marzo por la pandemia, que previsiblemente se quedarán cortas en abril y en mayo. En concreto, el volumen de hipotecas se situó en 2.981 millones, lo que supone millones menos que en el mismo mes de 2019. Las operaciones en consumo, por su parte, sumaron 1.833 millones, la cuantía más baja desde agosto de 2006. Mientras, las transacciones de créditos para el tejido industrial totalizaron 36.570 millones, frente a los poco más de 27.100 millones de marzo del ejercicio pasado.

 

Los principales banqueros han informado que en abril estas tendencias se han remarcado con profundidad, hasta el punto de que, por ejemplo, las hipotecas han llegado a caer en algún caso un 80%. Las entidades, confían, eso sí, en que a lo largo del año que la normalidad vaya volviendo se vaya reactivando el mercado, principalmente en la segunda parte de 2020. Eso sí, dan por hecho que en el conjunto del año las producción de financiación para la adquisición de viviendas caiga, al igual que bienes de consumo.

 

Este descenso en el segmento de particulares será compensado en parte, según sus estimaciones, por la mayor demanda en el colectivo empresarial. Hay que tener en cuenta que los avales públicos puestos a disposición del Gobierno, por 100.000 millones, permitirán una concesión de unos 130.000 millones. Además, las entidades lanzaron días después del decreto del Estado de Alarma sistemas de préstamos preconcedidos a autónomos, pymes y grandes empresas. Únicamente Santander, BBVA y CaixaBank, a través de este mecanismo automático, se comprometieron a otorgar mas de 70.000 millones.

 

Hasta la fecha, los préstamos con garantía estatal suman 36.190 millones, según las últimas cifras aportadas por el Ejecutivo, para los que se han usado 27.510 millones. En las últimas jornadas, tras el bloqueo inicial, el programa se está acelerando, aunque hay muchas empresas que aún están teniendo trabas para poder acceder a estas coberturas públicas. El Gobierno ha activado el tercer tramo de 20.000 millones para atender las solicitudes (60.000 millones en total), que en el caso de las grandes entidades su cupo ya estaría cubierto.

 

Los datos del Banco de España, además, reflejan que el aumento de los préstamos empresariales se produce en todas las franjas, pero especialmente en las operaciones de más de un millón de euros, que crecieron un 57%. En las financiaciones por debajo de 250.000 euros, el alza es del 10% y en las intermedias, del 23%.

 

Precios a la baja:

 

En cuanto a los tipos de interés que están reclamando las entidades, una de las polémicas surgidas a raíz de los avales públicos, estos cayeron de manera general. La media de los préstamos de menor cuantía para las sociedades no financieras, el precio (incluyendo comisiones y productos vinculados), se situó en el 2,44% TAE, frente al 2,59% de febrero; mientras que en los de mayor importe, en el 1,29%, en comparación con el 1,52% del mes anterior.

 

Las tasas aplicadas en hipotecas y en consumo del mismo modo experimentaron recortes, aunque inferiores. La TAE de la financiación para viviendas se redujo del 2,06 al 2,01% y para otros bienes del 8,05 al 7,93%.

 

 

 

 

 

 

FUENTE: EL ECONOMISTA